| Cloruro de Sodio | 
         68.3 Kg.  | 
       
       
         | Cloruro de Magnesio | 
         14.23 Kg.  | 
       
       
         | Sulfato de Sodio | 
         11.38 Kg.  | 
       
       
         | Cloruro de Calcio | 
         3,12 Kg.  | 
       
       
         | Otras sales | 
         2,97 Kg.  | 
       
     
    Algunas de estas sales son necesarias para 
    la vida: El Cloruro de Calcio es un elemento sustancial para los animales, 
    que lo utilizan para formar sus conchas o esqueletos, pero el Cloruro de 
    Potasio, el Bicarbonato de Calcio y los diferentes Nitratos, Nitritos, 
    Fosfatos y Silicatos también son empleados por todos los seres vivientes, 
    animales o vegetales. 
    Como se puede apreciar, cada una de estas 
    sales y la suma de todas ellas forman el componente esencial para la vida en 
    el mar, y por ende, para nuestra vida, pero no sólo por su química, sino 
    también por su física; si el mar llegara a desaparecer, las noches serian 
    heladas y los días extremadamente calurosos, por lo tanto, la vida seria 
    absolutamente imposible... 
    La vida en el mar se desarrolla en toda la 
    superficie y en las profundidades. La vida depende exclusivamente del 
    fitoplancton (diminutas plantas con clorofila que flotan en las aguas 
    superficiales) y que a su vez sirven de alimento al zooplancton (animales 
    diminutos). Estos son la base del alimento de casi todas las especies 
    marinas. 
    En la actualidad es muy cómodo señalar que 
    el mundo solo puede salvarse explotando recursos del mar, pero sostener esta 
    afirmación es totalmente desacertado, puesto que estos recursos no son, en 
    absoluto, inagotables o infinitos. Por tanto debe ponerse un límite a tanta 
    compra gratuita en el Supermercado Oceánico. 
    Cuatro de las regiones del mundo más 
    abundantes en vida marina ya han sido agotadas, y el resto se acerca rápida 
    y peligrosamente al agotamiento debido a la contaminación (vertidos de 
    petróleo -cada 8 meses, alrededor de 40 millones de litros de crudo terminan 
    en el mar-, pesticidas, vertidos industriales y el cieno de las tierras 
    deforestadas) y a la explotación irracional de sus recursos y la destrucción 
    del hábitat. 
    Algas 
    En el Océano se encuentran unas 17.000 a 
    18.000 especies de plantas marinas. De las llamadas algas, únicamente las 
    pardas (Ascophyllum nodosum, Laminaria y Undaria), y las rojas (Porphyra, 
    Euchema y Chondrus crispis) son consideradas de importancia económica.
    
    Se emplean para productos farmacológicos 
    por sus supuestas propiedades anticancerígenas, antimicrobianas, 
    anticoagulantes y antiinflamatorias, para combatir el envejecimiento de la 
    piel y el sarcoma en los tejidos blandos. 
    ¿Tienen las algas una composición similar 
    al plasma sanguíneo, capaz de activar el metabolismo, aliviar el cansancio y 
    el agotamiento físico? 
    ¿Son realmente insustituibles las algas 
    como el alimento del futuro, debido a sus componentes (proteínas, vitaminas, 
    provitaminas, azúcares, yodo, calcio, manganeso, potasio, hierro y otros 
    oligoelementos? 
    ¿Tienen realmente la capacidad de actuar 
    como descontaminantes de la radioactividad? 
    ¿Podrá reequilibrarse nuestro cuerpo y 
    recuperaremos la belleza perdida, si hacemos tratamientos de algoterapia?
    
    Pero la explotación de las algas no se 
    limita sólo a medicamentos, sino también como alimento para ciertas especies 
    de ganado; se emplea un preparado de harina de algas marinas para la 
    alimentación de cerdos, pollos y peces de criadero (entre los que se 
    destacan los salmones). 
    Las gigantescas algas del Pacifico se 
    recogen como fuente de yodo y de “algina”, una sustancia usada en la 
    preparación de helados y postres. 
    Otros tipos de algas, como el “musgo 
    irlandés”, se emplean para curtir cueros y en la fabricación de cremas de 
    belleza y champús. 
    De algunas variedades de algas se obtiene 
    una sustancia gelatinosa que absorbe una gran cantidad de agua. Los médicos 
    la emplean en sus investigaciones como campo de cultivo propicio para las 
    bacterias. La industria lo usa también para el acabado de los textiles y en 
    farmacología, para fabricar laxantes y otros preparados. 
    ¿Vale la pena sobreexplotar estos recursos? 
    ¿Por qué no usarlos con moderación? ¿Y si nos detuviéramos a reflexionar 
    sobre qué clase de planeta queremos dejarles a nuestros hijos? 
    Invertebrados 
    Se emplean extractos de infinidad de 
    organismos marinos, como los corales, esponjas y tunicados con fines 
    medicinales. 
    Se obtiene quitina y quitosán a partir de 
    los caparazones de crustáceos. 
    Los mejillones y los caracoles de agua 
    dulce se emplean en el tratamiento de la piel y la obesidad; para ello, se 
    debe pescar una cantidad mayor de la habitual, lo que termina con la 
    sobreexplotación de los mismos. 
    La Tridacna es utilizada para la 
    alimentación humana y para adornar los grandes acuarios, uno de los grandes 
    motivos de sobreexplotación de esta especie. 
    Entre otros invertebrados marinos, los 
    gasterópodos de la superfamilia Conoidea son utilizados para la preparación 
    de pépticos y proteínas neuroactivas con el supuesto fin de ayudar al 
    sistema nervioso y neuromuscular. 
    Los hermosos corales son vitales para la 
    existencia humana; son la zona de cría de los peces. Los arrecifes están 
    siendo reducidos por efecto de la expansión humana. Esta destrucción comenzó 
    en el siglo XIX debido a la pesca indiscriminada, hoy en día se suman la 
    contaminación y el calentamiento global, lo que ya ha exterminado 
    aproximadamente una cuarta parte de los arrecifes existentes. Estudios 
    científicos auguran que los Arrecifes Coralinos solo sobrevivirán unas pocas 
    décadas si no se los protege urgentemente. 
    En la zona antártica, debido a la 
    disminución de las reservas de ballenas, han aumentado espectacularmente las 
    poblaciones de Krill, un pequeño crustáceo similar al camarón que se 
    alimenta de fitoplancton. 
    Dado que el krill contiene muchas vitaminas, 
    proteínas (70%), minerales y oligoelementos, ácidos grasos (oleico y 
    omega-3) se está explotando en grandes operaciones comerciales promocionadas 
    por los dos países más interesados: Japón y Rusia. La sobreexplotación del 
    Krill, parte esencial de la cadena alimenticia de casi todas las especies 
    Antárticas, podría tener efectos desastrosos a medio plazo. 
    Varias clases de cefalópodos son capturados 
    en primer lugar por su valor comercial. La industria está estudiando también 
    sus potenciales poderes antidepresivos, anticancerígenos, desinfectantes, 
    protectores cardiovasculares y afrodisíacos. Sumado a todo ello, se les 
    atribuyen también poderes contra el envejecimiento. 
    Grandes mamíferos 
    La matanza indiscriminada de las Ballenas, 
    que comenzó alrededor del año 1600, representa un excelente negocio para la 
    industria ballenera: aceite, carne, grasa, piel, ambar gris (se encuentra en 
    el interior de los cachalotes y se utiliza como fijador de perfumes y 
    saborizante de comidas y bebidas). 
    Los principales países cazadores de 
    ballenas son Japón, Rusia, China, Noruega, Dinamarca, Islandia, Corea, 
    Finlandia, Australia, Nicaragua y Panamá. 
    Las orcas y delfines también son objeto de 
    explotación industrial. De una cera que se encuentra en el semen del delfín 
    se extrae el alcohol de cetilo. Su carne es apreciada en muchas culturas, 
    entre ellas la China, pues los hombres consideran que comiéndola aumenta su 
    virilidad. 
    Estos cetáceos están viendo reducidos sus 
    efectivos y destrozado su hábitat natural, son capturados y separados de sus 
    familias, perseguidos por barcos que pretenden pescar una hembra en edad de 
    apareamiento o bebés para los oceanarios de todo el mundo. Los que son 
    desechados vuelven al mar sufriendo shock, depresiones, resfriados y muerte.
    
    Las redes de deriva, caladas ilegalmente en 
    muchos casos con el objetivo de capturar peces espada y túnidos, se ceban en 
    los delfines, que mueren por ahogamiento cuando se enredan en ellas. 
    
    Tiburones 
    Algunos estudios revelan que los tiburones 
    son inmunes al cáncer, a los problemas circulatorios y a la contaminación, 
    pero aún no se sabe el por qué. 
    Del tiburón se aprovechan muchas cosas: el 
    aceite de su hígado es muy rico en vitamina A, y ha sido muy requerido por 
    la industria farmacéutica, aunque ya no es muy rentable. La piel se emplea 
    en la industria textil y en curtidos para: carteras, cinturones, bolsos, y 
    zapatos, entre otras cosas. También se obtienen lubricantes y productos 
    cosméticos. 
    Mas de 100 millones de tiburones son 
    capturados cada año, en su mayor parte para satisfacer la demanda existente 
    en Asia (para hacer una sopa en la que se utilizan solo sus aletas), por el 
    temor que nos inspiran y, lastimosamente, como simples trofeos de pesca. 
    Todo ello está causando estragos en estas especies, de ciclo reproductivo 
    muy lento, de forma que están al borde del colapso a nivel mundial. 
    
    El tiburón ocupa el primer lugar en la 
    cadena alimenticia. Razonemos entonces: su exterminio ha desequilibrado ya 
    el ecosistema, en consecuencia, siguiendo la cadena natural, todas las demás 
    especies, incluida la humana, se verán afectadas en mayor o menor plazo.
    
    Reptiles 
    Las tortugas marinas se explotan por su 
    cuero (muy costoso) y por sus huevos. También se utiliza su grasa, que se 
    emplea en cremas faciales, revitalizantes, jabones, lociones y lubricantes. 
    En algunos países se consume su carne, aunque en muchos está prohibido 
    hacerlo. 
    Peces 
    El pequeño y fascinante caballito de mar, 
    es muy demandado en Asia, donde se utiliza siguiendo los preceptos de la 
    Medicina Tradicional China; una vez seco y reducido a polvo, se emplean en 
    preparados contra la impotencia sexual, para los huesos, el asma y las 
    enfermedades renales. Los caballitos de mar se emplean también como objeto 
    decorativo, pero lo más grave, es su venta a los acuaristas occidentales, 
    adonde no llega vivo ni el 10% de los ejemplares capturados. 
    El esturión está en peligro de extinción 
    debido a las presas y a la destrucción de los cursos de agua y sus hábitats 
    pero, en especial, por culpa de la pesca ilegal que pretende obtener 
    únicamente sus apreciadas y costosas huevas, (un negocio sin control que lo 
    ha llevado a la sobreexplotación). 
    En resumen 
    La excesiva actividad de las potencias 
    pesqueras (se extraen cada año, aproximadamente 100 millones de toneladas de 
    peces, mariscos, etc. y sin respetar los ciclos biológicos), está llevando a 
    este gran recurso marino a su total agotamiento. 
    En el mar Rojo, en la zona de Yemen y 
    Djibuti, prácticamente han desaparecido todos los tiburones, la cima de la 
    pirámide ecológica, y esto es solo un ejemplo de lo que está pasando a 
    escala mundial. 
    Los cetáceos están amenazados en todo el 
    mundo. Casi sin conocerlos, desaparecerán rápidamente de la faz de la Tierra 
    gracias a la ambición de unos pocos. En estos días en que paradójicamente 
    aumenta la conciencia ecológica del público, parece cada vez cuenta menos la 
    protección del medio ambiente y no se respetan las pocas iniciativas para 
    protegerlo (no se cumplen los compromisos de Kyoto, se reanuda la caza 
    comercial de ballenas, se matan 350.000 focas en Canadá “porque hay 
    demasiadas”...) ¿por qué no cambiamos esta tendencia? 
    Hemos agotado la mitad de las reservas 
    naturales de petróleo (un recurso NO renovable) del mundo, y se da por 
    sentado que en pocos años más se agotaran totalmente. ¿Y luego... qué?
    
    Minerales tales como el manganeso, el 
    níquel, el cobre y el cobalto, presentan interesantes perspectivas 
    económicas para su explotación comercial a partir del mar. La fosforita 
    (mineral compacto, terroso, variedad impurificada de la apatita) sirve de 
    base para fertilizantes. El barro rojo es una excelente fuente de cobre y 
    aluminio. El limo silícico, es usado como material filtrante, como abrasivo 
    y como elemento aislante en calentadores, hornos y refrigeradores. 
    Yacimientos de estaño, titanio, oro y circonio, junto a filones de hierro y 
    carbón, están siendo explotados actualmente. 
    La plata, junto a otros metales de alto 
    valor económico, así como otros minerales, están siendo “saqueados” del Mar 
    Rojo. 
    La globigerina (conchas de unos animales 
    llamados foraminíferos, con alto contenido de carbonato de calcio) se emplea 
    para la elaboración de hormigón; los extensos depósitos que reposan en el 
    fondo marino al alcance de todas las naciones y son el perfecto sustituto de 
    la piedra caliza. 
    En la Antártida, el último paraíso natural 
    (gracias a ser tan inhóspito) encontramos más de 100 especies de algas 
    diatomeas, 700 especies de algas bentónicas y alrededor de 100 especies de 
    algas de agua dulce. También encontramos más de 200 especies de peces, por 
    no hablar de grandes mamíferos como focas, ballenas y su alimento, el ya 
    nombrado krill. Sus recursos minerales y energéticos son numerosos; entre 
    ellos se cuentan el uranio, el petróleo, el carbón, el gas, el hierro y 
    otros 200 tipos más. Todos estos recursos naturales son codiciados por todos 
    los países y por las multinacionales. 
    ¿Cuál será el próximo blanco? 
    
    Todos y cada uno de los prodigiosos 
    recursos del mar son blancos inertes de grupos económicos que, en nombre del 
    progreso (y de las ganancias exorbitantes y rápidas que éste produce), 
    expolian sin miramiento en todo el mundo. Esto puede llevarnos 
    irremediablemente a la destrucción del planeta en un futuro no muy lejano.
    
    Por no hablar del deterioro de la 
    atmosfera: capa de ozono, contaminación... 
    Experimenté una alegría inmensa cuando el 
    Concorde dejó de volar... pero volaran otros aviones más grandes, más 
    sofisticados, con motores más poderosos... ¿Se sabe o se tiene conciencia 
    del oxígeno que consume en vuelo esta maravilla moderna? 
    ¿Qué sabemos de la capacidad (cada vez más 
    reducida) de la Madre Naturaleza para regenerar y recuperarse de semejantes 
    perjuicios?... 
    
    
    Texto original: Fanny Garcia (Hipocampo)
    
    Adaptaciones: Miquel Pontes (M@re Nostrum)